ARTE HEREDADO
CONSTRUCCIONES POPULARES
Las cubiertas de teja vana
El tejado en una construcción es la parte que la protege de las lluvias conduciendo las aguas afuera de su planta mediante la colocación de unas piezas solapadas llamadas tejas.
Las tejas pueden ser de diferentes tipos según las regiones: planas o combadas, con bordes, con cubrejuntas, etc.
Aunque a lo largo de la historia se han utilizado pizarras, lajas de piedra o incluso madera o cerámica para evitar la entrada de agua en las edificaciones, ya en época romana se usan las tejas elaboradas con barro y con forma plana (bandeja), pero este tipo de teja se ve obligado a evolucionar hacia una teja plana con bordes ya que el agua al bajar sobre ellas podría moverse lateralmente e introducirse bajo la pieza siguiente, produciendo las “goteras”. En las uniones de estas tejas se colocaría un tapajuntas con forma de U invertida.
En nuestra Sierra la forma tradicional de cubierta es utilizando la heredada y sofisticada teja árabe que soluciona el problema de las bandejas planas y los cubrejuntas con una misma pieza. Estas tejas árabes tienen forma abombada y troncocónica, de manera que unas piezas embocan dentro de las otras. La canal cumple la función de la bandeja romana: se coloca en posición cóncava y se superpone sobre la inferior. La cobija es la pieza que se coloca en posición convexa, envolviendo la de la hilada inferior.
Este entramado de tejas árabes, elaboradas con barro sobre un molde, cocidas en hornos, y colocadas en seco, es soportado tradicionalmente por una estructura de madera (vigas y tablas), es decir, la estancia bajo el tejado no está cubierta por un cielorraso, conociéndosele así como teja vana.
Su etimología es la siguiente: del latín vanus (hueco, vacío) y tegula (teja).
Este tipo de cubiertas, hoy tendentes a desaparecer, permitían la ventilación de las estancias pero suponían la fácil entrada de frío en invierno y calor durante el día en verano. Sí es cierto que al existir huecos entre las tejas las corrientes de aire podrían refrescar fácilmente las estancias en las noches de verano. Sin embargo, otro aspecto negativo de este tipo de cubiertas es la entrada de suciedad entre las ranuras de las tablas.


TEXTO Y FOTOGRAFÍAS: JESÚS SÁNCHEZ
Todo muy curioso y bien explicado. Muchas graçias.
ResponderEliminarCobija: preciosa palabra
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